Para promover la independencia de los ancianos en los centros de salud especializados, es esencial entender los problemas que puede causar una edad avanzada. ¡Descubre en este artículo algunas recomendaciones para un diseño seguro y cómodo!
Orientación
Aunque cada persona pasa por el proceso de envejecimiento de manera diferente, hay una serie de problemas que todos debemos enfrentar. Por un lado, la vista se deteriora. Todo parece más monocromo, por lo que se necesitan tonos y contrastes más intensos para distinguir las cosas.
Además, nuestro campo de visión se reduce y la orientación visual cambia radicalmente. Esto significa que se necesita un sistema de señalización coherente, especialmente en los centros de salud.
Los pacientes deben ser capaces de hacer una lectura rápida y fácil de la señalización, reduciendo la ansiedad causada por la desorientación. Debe ser simple, clara y legible, con fuertes contrastes y buena iluminación.
Movilidad
Se sabe que la movilidad de las personas mayores se reduce. Los músculos se vuelven más débiles, lo que obliga a recurrir a dispositivos de asistencia como bastones o sillas de ruedas.
En el acondicionamiento de las unidades de asistencia sanitaria, deberán preverse pasamanos para apoyar la movilidad, así como ascensores para facilitar la circulación entre los pisos. Las rampas y escalones también deben diseñarse con una pendiente suave para facilitar el paso de los pacientes de un lugar a otro.
Por último, las entradas principales deben tener sistemas de apertura automática, para fomentar la autonomía de los ancianos.
Ergonomía
Otra forma de garantizar el confort y la seguridad de los ancianos en los centros de salud especializados es garantizar la ergonomía del espacio y del mobiliario. En las salas de espera, por ejemplo, se recomienda elegir sillas o taburetes con reposabrazos. También se debe reservar un espacio para andadores y bastones, junto a sillas y bancos, con detalles visuales para facilitar la información.
El suelo debe ser lo más antideslizante posible, especialmente en los aseos y pasillos, para reducir el riesgo de caída. Optar por revestimientos como vinilo, lino o moqueta, ya que ofrecen una buena amortiguación.
Confort
En los centros de salud, la sala de tratamiento debe tener en cuenta las necesidades físicas de la persona de edad. Para su bienestar y seguridad, se recomienda instalar camas y sillones en los extremos redondeados para evitar accidentes.
Otro elemento importante es el contacto visual con la naturaleza. En los últimos años, la ciencia sugiere que la conexión con la naturaleza ayuda a mejorar el estado de ánimo y la concentración de los pacientes. A este respecto, Roger S. Urlich, profesor de arquitectura del Center of Healthcare Building Research, en Suecia, publicó un estudio que muestra que los pacientes alojados en habitaciones con vistas a un paisaje natural se recuperan más rápido y necesitan menos analgésicos que los demás. Por lo tanto, el contacto visual con la naturaleza en las salas de tratamiento o habitaciones ayuda a garantizar niveles constantes de bienestar y confort.
Por último, la calidad de los espacios verdes de los centros de salud es también un aspecto que merece nuestra atención. Las plantas de interior son generalmente eficaces para reducir el estrés y la ansiedad de los pacientes al tiempo que mejoran la calidad del aire.